En un día en que tanto alumnos como profesores del Liceo Agrícola Francisco Napolitano del Valle de Lluta, aprendieron a reconocer los distintos estadios de la plaga de “jerjeles” mediante capturas in situ, además de identificar los diferentes tipos de dípteros hematófagos, se realizó una nueva jornada de capacitación del programa de control de estos insectos.
Esta actividad estuvo a cargo del Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA, junto a la SEREMI de Agricultura de Arica y Parinacota y se llevó a cabo en el sector puente Santa Lucía -cercano al Km. 5, 5 del valle- y se dividió en una parte práctica de reconocimiento con apoyo de microscopio estereoscópico, de modo que el alumnado aprendiese a diferenciar larvas de pupas- y otra parte guiada por los profesionales de INIA, quienes realizaron una aplicación de “Vectobac” para dar a conocer su composición y efecto como uno de los componentes de manejo integrado de la plaga.
Al respecto la extensionista de INIA Marjorie Allende destacó que se trata de un producto biológico en base a una bacteria y que es específico para el control de dípteros, que un grupo de insectos al cual pertenecen los jerjeles.
Programa de control de jerjeles
El programa de control de dípteros hematófagos es financiado por el Gobierno Regional de Arica y Parinacota y ejecutado mediante un convenio con la Secretaría Regional Ministerial de Agricultura e INIA Ururi.
La SEREMI de la cartera; Ana Cecilia Rojas expresó que “estos esfuerzos conjuntos entre el MINAGRI, el GORE y la comunidad de Lluta permiten mejorar la calidad de vida de los habitantes del valle y con ello generar mejores condiciones de habitabilidad y desarrollo productivo de la zona”.
El gobernador regional, Jorge Díaz Ibarra, explicó que «el control de los jerjeles en el Valle de Lluta es importantísimo para fomentar la agricultura del sector. Para el Gobierno Regional es imperativo generar las condiciones para que las y los trabajadores del valle tengan mejores condiciones y evidentemente que, la fumigación de jerjeles, es fundamental para que puedan desarrollar su trabajo. Este programa, de 24 meses y por casi 200 millones de pesos, implica que, con fondos regionales, podamos generar las condiciones para que exista una agricultura de calidad en nuestra región».
El equipo de INIA manifestó que “se requiere de un trabajo en conjunto con la comunidad ya que cada actor es importante” y reiteró su llamado a participar en este tipo de capacitaciones y en la necesidad de que el valle mantenga una limpieza permanente de canales, drenes y compuertas evitando que la vegetación domine estos afluentes ya que son potenciales focos de crianza de jerjeles.
Finalmente, Patricio Álvarez, jefe de producción del liceo concluyó que “aprender haciendo permite que los estudiantes aprendan a reconocer en su hábitat natural a esta plaga, identificar las larvas, conocer el estado de los que pican a las personas y participar de mediciones en terreno para luego aplicar el tratamiento al agua y así disminuir la población de insectos”.
Equipo Prensa
Portal Agro Chile