Se trata del programa “Flora Melífera para Mejorar el Negocio Apícola, Fase II” financiado por el Gobierno Regional, iniciativa que luego de más de tres años de ejecución deja un importante legado en especies nativas, como también la recuperación de suelos y paisajes.
Notables incrementos en la oferta de flora melífera, la implementación de nuevos huertos y el apoyo permanente en capacitación e innovación para el desarrollo y emprendimiento de la agricultura familiar campesina del Biobío, todo esto enfocado en el apoyo a más de 200 agricultores de la región del Biobío, son parte de los resultados del programa “Flora Melífera para Mejorar el Negocio Apícola, Fase II”.
La importante iniciativa fue ejecutada por el Instituto Forestal (INFOR) –organismo adscrito al ministerio de Agricultura-, el cual fue financiado por el Gobierno Regional (GORE) del Biobío, a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional y que llega a su fin luego de más de tres años de arduo trabajo, con un monto superior a los 300 millones de pesos en su primera fase y sobre los 500 millones de pesos en su fase dos.
La actividad de cierre del proyecto se llevó a cabo en el Centro de Documentación de INFOR Biobío y contó con la presencia de la directora ejecutiva de la entidad, Sandra Gacitúa, la seremi de Agricultura, Pamela Yáñez; el jefe de división de Fomento e Industria del Gobierno Regional, Iván Valenzuela; la gerenta de la sede INFOR, Marta González; investigadores y beneficiarios correspondientes a su segunda fase que comenzara a implementarse en el año 2018.
Al respecto, la directora ejecutiva de INFOR, Sandra Gacitúa, puso énfasis en “nuestro compromiso está con los apicultores y con la recuperación del paisaje forestal-melífero de la Región del Biobío”. En ese sentido, detalló los impactos positivos del programa, que, en términos de cifras, contemplaron el uso de alrededor de 22 especies nativas para el establecimiento de huertos melíferos proveedores de néctar y polen para las abejas.
“Dentro de las especies utilizadas encontramos quillay, guindo santo, ulmo, litre, boldo, maqui, peumo, mardoño, corontillo, maitén, pelú, mayo, corcolén entre otras, llegándose a establecer 144 huertos melíferos en el periodo 2019 a 2022, sumándose a los ya establecidos entre 2015 y 2017 para hoy tener 204 huertos melíferos que involucran a 204 apicultores y sus familias y alrededor de 200 hectáreas plantadas”, enfatizó Gacitúa.
En ese sentido, la seremi de Agricultura, Pamela Yáñez, precisó que el ministerio de Agricultura junto a todas sus instituciones, en este caso INFOR, están siempre disponibles para ayudar a los agricultores. “Para nosotros es de especial importancia apoyar los rubros, que pertenecen a la agricultura familiar campesina de la región del Biobío. En este caso, apoyando a los apicultores para que de esta forma produzcan más y mejor miel, de forma sustentable y amigable con el ecosistema”, dijo la autoridad del agro.
Por su parte, jefe de división de Fomento e Industria del Gobierno Regional, Iván Valenzuela, manifestó que «Desde diversas perspectivas de inversión, como infraestructura, innovación, salud, cultura o el deporte, estamos trabajando para impulsar el desarrollo de la región. Y en competitividad, donde estamos en el séptimo lugar a nivel nacional, el apoyo en agricultura también es clave, así como los otros ámbitos ya mencionados, y qué mejor que respaldando y potenciando el trabajo de nuestros agricultores para mejorar su producción, aumentar sus ingresos y también por el aporte que puedan generar en otros puestos de empleo”.
La iniciativa también contempló acciones específicas como apoyos en la mantención de los huertos y un plan de asistencia de los apicultores con la implementación de equipos apícolas y mejoramiento de sus capacidades productivas desde la flor hasta el procesamiento de la miel.
En ese contexto, la directora del programa Flora Melífera II e investigadora de INFOR, María Paz Molina, recordó que la actividad apícola regional enfrenta una considerable pérdida de competitividad, consecuencia de una importante reducción de su producción, debido a causas multifactoriales, tales como años de sequía, procesos históricos de deforestación y cambios de uso de suelos forestales a agropecuarios.
“Por lo tanto- sostuvo- es muy esperanzador que existan pequeños propietarios, municipios, grandes empresas y agrupaciones campesinas interesadas en establecer huertos melíferos, pensando no solo en su producción, sino también pensando en la recuperación de nuestros suelos y nuestros paisajes”, apuntó Molina.
Cabe recordar que precisamente en su segunda fase, el programa involucró como beneficiarios directos a apicultores de 18 comunas tales como: Arauco, Cañete y Curanilahue en la Provincia de Arauco; Florida, Hualqui, Santa Juana y Tomé, en la Provincia de Concepción; y Antuco, Cabrero, Laja, Los Ángeles, Mulchén, Nacimiento, Negrete, Quilleco, Santa Bárbara, Tucapel y Yumbel, en la Provincia de Biobío.
Uno de ellos fue Ariel Fernández, quien además es presidente de la Cooperativa Agrícola Apícola RASCO. El agricultor tuvo especiales palabras de agradecimiento para el equipo de INFOR Biobío, para el proyecto, al que calificó como “un pedestal fundamental” en el desarrollo de su huerto y se refirió a la técnica de INFOR como “una de las mejores formas de plantar estos árboles nativos en Chile”.
En tanto, Cristina Inostroza, ingeniera agrónoma y asesora técnica de SAT Apícola de las comunas Yumbel y Tucapel, consideró que “tener un programa de forestación apícola como el que tiene INFOR, es de suma importancia para enriquecer no tan sólo el rubro apícola, sino también conservar y dar importancia a la flora en nuestra zona”. La experta también resaltó que “el nivel profesional de sus funcionarios y la cercanía con los usuarios de este programa es de suma importancia para el éxito de los huertos melíferos”.
Equipo Prensa
Portal Agro Chile