- La disciplina permitió, en los años 90, redescubrir la cepa Carmenere en Chile, que se creía extinta desde 1860 y hoy es una de las más emblemáticas de nuestro país.
- Por medio de este programa internacional, la OIV pretende crear una red internacional de expertos en ampelografía, además de impartir formación actualizada sobre una disciplina esencial para el sector vitivinícola.
Santiago, diciembre 2023.- Desde el lunes 4 de diciembre, y por primera vez en Chile, se está llevando a cabo el curso de ampelografía de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), organizado conjuntamente con el Consorcio I+D Vinos de Chile, y que permite a los participantes adquirir conocimientos profundos en el reconocimiento y la comprensión de las variedades de vid, ayudándoles a estar mejor preparados para los futuros retos del sector vitivinícola.
En total serán cinco días en las que los 27 participantes, provenientes de distintos países y, profesionales de los ámbitos de la viticultura, los recursos genéticos, el material vitícola y la investigación, escucharán a los especialistas y profesores de los centros de investigación en recursos genéticos vitícolas más prestigiosos de Chile, España y Francia. El curso está totalmente actualizado a las últimas tendencias en recursos genéticos, cambio climático y expectativas de la sociedad del medio ambiente, entre otros, y es eminentemente práctico, permitiendo adquirir amplios conocimientos de ampelografía. Al final del proceso, la OIV entregará un certificado para acreditar la participación de los asistentes.
“Traer este curso internacional de la OIV a Chile reafirma la importancia y la potencia del sector chileno en el sector vitivinícola mundial. A su vez, refuerza la histórica participación de Chile en la OIV, fundada en 1952, siendo el primer país latinoamericano y del hemisferio sur en ser miembro. Este curso confirma también la disciplina de la ampelografía a nivel mundial, que en el caso de Chile se refleja en el redescubrimiento del Carmenere, variedad emblemática del país”, señaló Alejandro Fuentes, Head of Unit Economy & Law de la OIV.
El curso incluye también visitas a viñedos emblemáticos para conocer la diversidad genética de la vid en Chile y su patrimonio vitícola.
“Para nosotros, como Consorcio I+D Vinos de Chile, es muy importante que la OIV haya decidido realizar este curso de tanto prestigio en nuestro país. Ello reafirma además nuestra posición mundial en el sector del vino, y nuestro compromiso con una investigación que permita mejorar la competitividad de nuestro sector. Estamos muy contentos de recibir a la OIV y agradecidos también del apoyo de Corfo para para desarrollar líneas de investigación en material vegetal de mejor calidad sanitaria y trazabilidad, y en esto último la ampelografía es una herramienta importante.”, señaló Patricio Parra, Gerente General del Consorcio I+D Vinos de Chile.
Es importante recordar también que, gracias a la ampelografía, se logró en Chile un “redescubrimiento” en los años 90 de la variedad Carmenere que se creía extinta desde 1860. Dicha cepa se ha convertido en una de las más emblemáticas del país, y ha tenido un desarrollo muy significativo. Hoy Chile es el principal productor y exportador de Carmenere en el mundo, y como sector ha sabido explotar adecuadamente las características de esta variedad al “terroir” chileno, produciendo una gran calidad en sus vinos.
Sobre la OIV
Desde su creación en 1924, la OIV trabaja en el ámbito de la ampelografía y de los recursos genéticos de la vid. Una primera resolución adoptada en 1938 definió un método general para estudiar las cuestiones ampelográficas. Hoy, casi 100 años después la organización continúa manteniendo, estudiando y difundiendo las disciplinas de la ampelografía y los recursos genéticos al sector vitivinícola.
Equipo Prensa
Portal Agro Chile
