Es vital implementar cortafuegos y utilizar maquinaria y herramientas modernas, como drones y chipeadoras que ayudan a reducir riesgos y proteger recursos, haciendo de la inversión en prevención una prioridad esencial.
Noviembre 2024.- En la temporada 2023-2024, se registraron 5.846 incendios que afectaron 71.923 hectáreas, generando preocupación en la comunidad. De cara a la temporada 2024-2025, el Ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, instó a los municipios a «invertir en prevención» y destacó las medidas en marcha. Durante la presentación de un avión Air Tractor 802, subrayó la importancia de que las localidades adopten acciones proactivas, con el apoyo de los planes y mapas de riesgo de Conaf.
Para mitigar daños, se han implementado estrategias como la creación temprana de cortafuegos. Luis Álvarez de Dercomaq comenta que “existen diversas maquinarias para construir cortafuegos, como palas para tractores, chipeadoras, desmalezadoras y arados”.
Un cortafuego se define como una zona sin vegetación o con estructuras que ayudan a detener o disminuir la propagación del fuego. Hay dos tipos principales:
- Cortafuego barrera: Puede ser natural (ríos, roqueríos) o artificial (creado por el ser humano, como caminos o vías de tren).
- Cortafuego mineral: Es una franja de terreno donde se ha eliminado toda la vegetación, dejando solo tierra y piedras. Para su construcción, se raspa el suelo hasta que aparece el material mineral y su ancho debe ser, al menos, el doble de la altura de lo que se busca proteger.
En años recientes, se han utilizado chipeadoras Bear Cat para reducir material vegetal y el riesgo de incendios, y pulverizadores Jacto con químicos para el control de malezas. Luis Alvarez recomienda varias maquinarias que son las más solicitadas por sus clientes:
- Desmalezadoras: Eliminan vegetación densa y arbustos, reduciendo la carga de combustible y la propagación de incendios.
- Palas Cola: Mueven y apilan materiales vegetales, ayudando a crear cortafuegos y reduciendo residuos inflamables.
- Incorporadores: Mezclan y entierran materia orgánica, promoviendo su descomposición y enriqueciendo el suelo para un crecimiento más saludable.
- Trituradoras: Descomponen restos de vegetación en fragmentos pequeños, disminuyendo el material combustible y el riesgo de incendios.
- Arados: Labran el suelo, interrumpiendo la continuidad de la vegetación y estableciendo barreras que limitan la propagación del fuego.
Sobre las nuevas tecnologías en la construcción de cortafuegos, el experto destaca que “se está avanzando en el estudio del terreno con drones, que permiten identificar áreas críticas a proteger”, como:
- Senderos y caminos internos
- Líneas de tren
- Zonas de recreo, como balnearios y campings
- Poblaciones cercanas
- Estructuras, como casas y galpones
- Tendidos eléctricos
“Es esencial prevenir estos incidentes aprovechando el terreno, la asesoría de expertos y la maquinaria disponible para evitar pérdidas de animales, producción y vidas humanas. Cada inversión en este ámbito debe aprovecharse al máximo”, concluye Luis Alvarez.
Equipo Prensa
Portal Agro Chile