Por Rodrigo Sandoval, CEO I Am Not Plastic

Un reciente análisis de casi 3.000 estudios, liderado por la Universidad de California en San Francisco, reveló un vínculo alarmante entre los microplásticos y el cáncer de colon y pulmón. Publicado en Environmental Science & Technology, el estudio muestra cómo la exposición a estos plásticos afecta órganos clave como los pulmones y el colon. Aunque algunos expertos advierten que los resultados son preliminares, la creciente evidencia sobre sus efectos en la salud humana pone de manifiesto que la contaminación plástica es una amenaza tanto ambiental como para nosotros mismos.

Y es que hoy el mundo enfrenta una crisis global por este material. Según la ONU, cada año se vierten entre 8 y 12 millones de toneladas de plástico al océano. Además, la OMS ha alertado sobre la presencia de microplásticos en el agua potable, lo que agrava las preocupaciones sobre sus efectos a largo plazo en nuestra salud. ¿Hasta qué punto estamos dispuestos a ignorar las consecuencias generadas por el plástico? ¿Qué acciones podemos tomar como sociedad para mitigar su impacto?

Una de las soluciones más prometedoras es el uso de bioplásticos compostables, que se descomponen más rápidamente y pueden reducir la acumulación de plástico convencional en vertederos y océanos. Sin embargo, no basta con reemplazar un material por otro; es necesario un enfoque integral que contemple la reducción y el reciclaje de plásticos, así como la transición hacia alternativas biodegradables.

En I Am Not Plastic entendemos que la lucha contra la contaminación por este nocivo elemento no solo pasa por ofrecer productos compostables, sino también por acompañar a las empresas en el proceso de adaptación hacia prácticas más sostenibles. Por ello, mediante asesoramiento especializado, ayudamos a las compañías a reducir su huella plástica, entendiendo sus necesidades y proponiendo soluciones personalizadas; un enfoque que se ha convertido en el motor de nuestro trabajo, ya que sabemos que la transición hacia la sostenibilidad es un proceso único para cada organización.

Así las cosas, las empresas juegan un papel crucial en esta transformación. Se estima que el 91% del plástico mundial no se recicla, y la mayoría de este termina contaminando el medio ambiente. Pero a través de la implementación de estrategias de reducción de plásticos y el uso de bioplásticos compostables, las compañías pueden contribuir significativamente a la salud del planeta y posicionarse como líderes en sostenibilidad.

En 2025, el reto es reducir efectivamente la huella de plástico, lo que requiere una colaboración activa entre gobiernos, empresas y consumidores. En I Am Not Plastic estamos comprometidos no solo con ofrecer soluciones compostables, sino con acompañar a las empresas en su camino hacia un futuro más limpio. El cambio está en nuestras manos, y cada acción cuenta en la lucha contra la contaminación plástica. Juntos, avanzamos hacia un mundo más saludable para todos.

Google News Portal Agro Chile
Síguenos en Google Noticias

Equipo Prensa
Portal Agro Chile

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here