Álvaro Palma, Encargado de Cumplimiento Medioambiental en Samsung Chile
Es importante que en la Semana del Medioambiente podamos reflexionar sobre la grave crisis de contaminación por plásticos que enfrentamos y, para promover acciones concretas destinadas a su mitigación. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y el Gobierno de Costa de Marfil, país anfitrión, anunciaron que el tema central de esta conmemoración mundial será precisamente la contaminación por plásticos, problemática que afecta a nuestro planeta en todas sus dimensiones.
Los datos de la ONU son alarmantes. Más de 400 millones de toneladas de plástico se producen cada año en el mundo: la mitad se concibe para un solo uso y menos del 10% se recicla. Además, entre 19 y 23 millones de toneladas de desechos plásticos terminan en nuestros lagos, ríos y mares anualmente. Los microplásticos se infiltran en nuestros alimentos, agua y aire, amenazando la salud humana y la biodiversidad. La contaminación por plásticos afecta a todos los ecosistemas.
Como fabricantes de tecnología, es necesario resaltar tres obligaciones fundamentales referentes a la sustentabilidad y que existen al interior de la industria que día a día potenciamos: reducción, reutilización y reciclaje. Dichas dimensiones son, y serán siempre, cruciales para generar un cambio real y sostenible en nuestra sociedad.
El reciclaje es una de las piedras angulares en la lucha contra la contaminación por plásticos. En Samsung, por ejemplo, nos hemos comprometido a establecer campañas para el reciclaje de productos antiguos, logrando reciclar 240 toneladas de productos de línea blanca, televisores, equipos de música y teléfonos inteligentes durante el año pasado. Para este 2023 la meta es alcanzar las 300 toneladas de reciclaje, sólo en Chile. Estas cifras demuestran el potencial que tenemos para reducir nuestro impacto ambiental y fomentar la economía circular. Pero aquello no es suficiente: es esencial que más empresas se unan a la causa y promovamos juntos una producción sostenible.
Como industria, no solo debemos incentivar sobre la importancia de reducir el consumo de plásticos de un solo uso, sino que fomentar prácticas más responsables, tanto en el negocio como hacia las personas. Es necesario que todos asumamos esa responsabilidad y nos comprometamos a tomar acciones concretas para que nuestro planeta, por fín, respire.
Equipo Prensa
Portal Agro Chile